Vida. Nieves S. N.
¡Estoy viva!
Sentirse viva es sentirse, sentir cuerpo de emociones. Dejar que todas quepan en él. Si algo aprendí de la Noche fue a dejarme emocionar. Si algo aprendí de la Luz fue a abrazar también el dolor, la tristeza, ser humilde con una misma, saberse, lamerse las propias heridas. En la infancia en ocasiones aprendemos a no llorar. Ahora brindo por poder recoger en barreños lágrimas de melancolía. Estoy viva. He amado. Estoy viva. Me ha dolido el desamor. ¡Estoy viva!
2 comentarios:
Desde la autoridad que me confieren las canas que me quedan puedo atestiguar que es cierto, ¡que estás viva! y por los cimientos sobre los que te asientas, tu capacidad de decisión y la potencia con que luchas sé no es fácil derrumbarte. Para mí que los samurais eran mujeres. Besos. Maxi
Gracias, padre. La clave del samurai, de la fuerza y la potencia es saber reconocer lo que duele y sacarlo llorando. Si no, se convierte en rabia venenosa. Te quiero
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