Ser ciego de razón en plena luz. Ser vidente en la sombra. Son al cabo el mismo estado. El único en que somos libres de abrirnos a la intuición. Esa gran facultad de conocimiento enterrada en estas monstruosas sociedades racionalistas que habitamos.
La irracionalidad, la intuición, habita en llanuras inmensas donde se puede construir mediante la alquimia de los sentidos, un mundo "otro". Tener posibilidades de sentirlo todo. Lo impuesto es sumamente limitadísimo...
2 comentarios:
La irracionalidad, la intuición, habita en llanuras inmensas donde se puede construir mediante la alquimia de los sentidos, un mundo "otro". Tener posibilidades de sentirlo todo. Lo impuesto es sumamente limitadísimo...
Lo impuesto tiene poco futuro. De ahí a la revolución. Besos, Say.
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